Pilbara Minerals, una compañía minera de litio y tantalita, ha completado su proyecto de expansión P680 con una nueva instalación de trituración y clasificación de minerales en la operación de Pilgangoora en Australia Occidental. Según la empresa, esta instalación es la más grande de su tipo en el hemisferio sur y la más grande del mundo en procesamiento de litio.
Mayor capacidad de producción
Esta instalación, que tritura y separa el mineral de litio de los desechos, tiene una capacidad de clasificación de más de 1.000 toneladas por hora. Se espera que esta tecnología aumente la capacidad de producción de Pilgangoora en un 30%. Además, sienta las bases para la próxima fase de expansión a un millón de toneladas por año a través del proyecto P1000.
Apoyo financiero del gobierno
El proyecto P680, valorado en 404 millones de dólares australianos, recibió el respaldo financiero de Export Finance Australia y Northern Australia Infrastructure Facility, con un total de 250 millones de dólares del gobierno australiano. Durante la fase de construcción de dos años, se crearon más de 350 empleos directos. Se espera que se mantengan aproximadamente 300 empleos adicionales durante la vida operativa de la mina.
Compromiso gubernamental con la transición energética
Dale Henderson, director gerente y CEO de Pilbara Minerals, comentó: «El apoyo financiero del gobierno australiano para el desarrollo de minerales críticos respaldó el proyecto P680 y señala el fuerte compromiso del gobierno de garantizar que Australia aproveche las oportunidades económicas presentadas por la transición global hacia energías limpias». El ministro de energía, Reece Whitby, quien asistió a la ceremonia de inauguración, agregó que los empleos adicionales «respaldarán las ambiciones de nuestro estado de convertirse en un jugador importante en la transición energética global».
Impulso a la industria del litio en Australia Occidental
Pilbara Minerals afirma que su nuevo desarrollo representa la próxima frontera en el procesamiento de litio de roca dura. Esto podría impulsar la participación de Australia Occidental en la producción mundial de litio, que alcanzó las 170.800 toneladas en 2023 y se espera que crezca a una tasa anual compuesta de más del 13% para 2030.